Rauðasandur: la espectacular playa de arena roja de Islandia
En un país donde casi todas las playas son de arena volcánica negra, Rauðasandur ofrece algo completamente diferente. Esta playa de arena roja está en los fiordos occidentales de Islandia y rompe totalmente con lo que esperas ver allí. Si buscas escapar de las hordas de turistas y ver algo realmente único en Islandia, tienes que añadir Rauðasandur a tu lista.
Información clave
- Rauðasandur es una playa de 10 kilómetros de arena roja en los fiordos occidentales de Islandia, hecha de conchas de vieira machacadas, no de roca volcánica.
- Ve entre junio y agosto, que es cuando las carreteras están abiertas y el tiempo no es tan salvaje.
- Necesitas un 4x4 para la carretera de grava (Ruta 614) que te lleva hasta la playa.
- Con marea baja ves mucha más arena rojo-naranja y puedes observar mejor los animales.
- Cerca tienes los acantilados de Látrabjarg (el santuario de aves más grande de Europa) y la histórica iglesia de Saurbæjarkirkja.
¿Qué es Rauðasandur?
Rauðasandur (que significa "Arena Roja") es una franja de playa de 10 kilómetros en la costa sur de la península de los fiordos occidentales de Islandia. Mientras que las demás playas de Islandia son casi todas negras, esta va desde el amarillo dorado hasta el rojo óxido y cambia de color según la luz, el tiempo y las mareas.
La playa tiene este color por las conchas de vieira machacadas y restos de vida marina que se han ido acumulando durante miles de años. Es un contraste brutal con el mar azul y las montañas verdes que la rodean.
La playa es súper plana y ancha, sobre todo cuando baja la marea y aparecen unas extensiones enormes. Caminar por Rauðasandur es raro pero precioso. La arena roja se extiende durante kilómetros, con charcos que reflejan el cielo como si fueran espejos.
Historia y Formación
Rauðasandur es completamente diferente a las demás playas islandesas por su geología. Mientras que la mayoría de costas de Islandia tienen arena negra del basalto volcánico, el color rojo-naranja de Rauðasandur viene de miles de años de olas machacando conchas marinas hasta convertirlas en pequeños trocitos. Estos fragmentos de concha tienen minerales como el hierro que le dan a la playa ese color tan cálido, que va cambiando con la luz.
Pero más allá de su historia natural, Rauðasandur tiene una historia humana bastante siniestra. Esta zona fue el escenario de los asesinatos de Sjöundá de 1802, uno de los crímenes más famosos de Islandia. En la granja aislada de Sjöundá, en el extremo este de la playa, dos amantes, Bjarni Bjarnason y Steinunn Sveinsdóttir, planearon matar a sus respectivos cónyuges para poder estar juntos. El crimen conmocionó a toda Islandia. La pareja fue arrestada y los juzgaron y los ejecutaron en 1805.
Esta historia tan trágica inspiró después la novela islandesa "Svartfugl" (Pájaro Negro) de Gunnar Gunnarsson, lo que hace que Rauðasandur sea importante también en la historia cultural de Islandia. Hoy todavía puedes ver las ruinas de la granja de Sjöundá.
Dónde está y cómo llegar
Rauðasandur está en la parte sur de los fiordos occidentales de Islandia, en la península de Látrabjarg. Llegar hasta allí es complicado, porque estamos hablando de una de las zonas más remotas de Islandia.
Llegar en Coche
Desde Reykjavík, son unas 5-6 horas conduciendo (unos 400 km). Coge la Ring Road (Ruta 1), luego la Ruta 60 hacia los Fiordos Occidentales, sigue por la Ruta 62 hacia Patreksfjörður. Desde ahí, toma la Ruta 612 hacia Látrabjarg y al final giras en la Ruta 614 (Rauðasandsvegur), que va directa a la playa.
La Ruta 614 es una carretera de grava de montaña bastante dura, con tramos empinados y curvas cerradas. Baja de golpe desde las Tierras Altas hasta la costa y en algunos sitios no hay ni barreras. Aunque la mantienen durante el verano, es muy recomendable que alquiles un 4x4. Si no te ves conduciendo por caminos así de complicados, mejor apúntate a un tour desde Patreksfjörður.
En Barco
Otra opción es coger el ferry Baldur desde Stykkishólmur en la península de Snæfellsnes hasta Brjánslækur en los fiordos occidentales. Desde Brjánslækur tienes como una hora de coche hasta Rauðasandur. Esta ruta por mar está bastante bien porque las vistas son chulas y puede ser una buena alternativa al viaje largo por carretera.
Ten en cuenta que fuera del verano (junio-agosto), la Ruta 614 se cierra casi siempre por la nieve y el hielo, así que en invierno no puedes llegar a Rauðasandur.
Qué hacer en Rauðasandur
Desde pasear por la playa hasta ver animales, hay un montón de cosas que hacer en este bonito sitio:
Pasear por la playa y buscar conchas
Lo principal que vas a hacer en Rauðasandur es caminar por esta extensión enorme de arena roja-dorada. Cuando baja la marea, puedes caminar súper lejos por la arena firme, donde las zonas húmedas reflejan el cielo. El color y la textura de la arena van cambiando mientras caminas. En algunos sitios tienes un polvo fino y rosado, en otros granos más gruesos y dorados o trozos de conchas que se ven perfectamente.
Caminar por la orilla del agua te da la oportunidad de encontrar conchas, cangrejos pequeños y otros restos marinos. Eso sí, recuerda hacer solo fotos de lo que veas, deja la playa tal como la encuentras para que otros puedan disfrutarla también.
Ver animales
En Rauðasandur vive un montón de fauna diferente. Hay una colonia de focas comunes en la bahía, que muchas veces ves descansando en los bancos de arena o sacando la cabeza del agua. El mejor momento para ver focas es durante la marea baja en el extremo oeste de la playa, donde suelen salir a la arena.
Si te van los pájaros, vas a ver un montón de aves costeras. Charranes árticos, ostraceros, chorlitos y patos eider son visitantes habituales. Como Rauðasandur está cerca de los acantilados de Látrabjarg, puedes llegar a ver algunos de los millones de aves marinas que anidan allí, incluidos los frailecillos, durante el verano (mayo-agosto).
Para ver bien los animales, llévate unos prismáticos y mantén las distancias, especialmente con las focas, que no les gusta nada que las molesten.
Fotografía
Los fotógrafos van a alucinar en Rauðasandur. El contraste entre la arena “rojo óxido”, el océano azul y las montañas verdes crea unas imágenes brutales. La mejor luz para hacer fotos es por la mañana temprano o por la tarde, cuando el sol está bajo y hace que los colores rojos de la arena sean más intensos.
Con marea baja, la arena húmeda crea reflejos y las pozas de marea te dan opciones de encuadre geniales. Para fotos de paisaje, si subes un poco por la colina detrás de la playa, tienes vistas de toda la bahía. En verano, el Sol de Medianoche ilumina la playa con una luz dorada desde las 10 de la noche hasta la 1 de la madrugada. Es el momento perfecto para hacer fotos sin ni un alma por allí.
Explorar sitios históricos
Si te va la historia, tienes que visitar la iglesia de Saurbæjarkirkja cerca del extremo oeste de la playa. Es una iglesia pequeña y negra de césped que trajeron de otra parte de los fiordos occidentales en 1982 y que ahora es como una postal del patrimonio rural de Islandia.
Si eres aventurero, puedes buscar las ruinas de la granja de Sjöundá en el extremo este de la playa, donde pasaron los famosos asesinatos de 1802. Estar ahí entre los cimientos cubiertos de hierba, con solo los gritos de las gaviotas y el viento alrededor, te conecta de verdad con el pasado de Islandia.
Hacer senderismo
Para los que quieren moverse más, hay varias rutas de senderismo alrededor de Rauðasandur. Una que está muy bien es subir Skaufhóll, una colina en el lado oeste desde donde tienes vistas de la playa y toda la zona. Si eres un senderista con experiencia, puedes plantearte el sendero más largo que va por la costa y que conecta Rauðasandur con los acantilados de Látrabjarg, aunque esto ya requiere prepararse bien y seguramente organizar el transporte de vuelta.
El terreno alrededor de Rauðasandur es muy variado: dunas de hierba, rocas que sobresalen, senderos de montaña; cada uno te da vistas diferentes de este paisaje tan único.
Información práctica para visitantes
Ir preparado es fundamental cuando visitas un sitio tan remoto:
El tiempo
El tiempo en los fiordos occidentales cambia muchísimo, incluso en verano. Las temperaturas suelen ir de 8 °C a 15 °C durante los meses de verano, pero pueden aparecer vientos fuertes, niebla y lluvia de la nada. Como esto está en la costa, el tiempo puede cambiar incluso más rápido; una mañana soleada se puede convertir en una tarde con niebla sin avisar.
Siempre mira el pronóstico antes de salir y prepárate para todo tipo de condiciones. Como Rauðasandur está lejísimos, tienes que ser autosuficiente si cambia el tiempo. Si hay poca visibilidad o vientos fuertes, mejor retrasa la visita o no te aventures demasiado.
Cuándo ir
El verano (junio a agosto) es sin duda el mejor momento para ir a Rauðasandur. Durante estos meses la carretera está abierta, hay luz casi 24 horas y los animales están más activos. Julio suele ser lo mejor porque combina tiempo estable con buena observación de fauna, especialmente para ver frailecillos en Látrabjarg.
Si quieres ver los colores de la playa en todo su esplendor, planifica la visita para cuando haya marea baja en un día soleado. Mira las tablas de mareas antes, porque la diferencia entre marea alta y baja afecta muchísimo a cuánta arena roja puedes ver. La playa está más espectacular con sol directo, sobre todo por la mañana temprano o por la tarde.
Fuera del verano, llegar se complica mucho. Para octubre, la nieve ya suele cerrar la Ruta 614 hasta mayo o junio siguiente. Aunque algunos visitantes sí llegan a Rauðasandur a finales de mayo o principios de septiembre, siempre revisa las condiciones de la carretera en road.is antes de lanzarte a la carretera.
Qué llevar
Como Rauðasandur está muy lejos y las condiciones pueden cambiar, prepararse bien es esencial:
- Botas de senderismo impermeables: Las necesitas para cruzar arena húmeda y arroyos poco profundos para llegar a la playa.
- Ropa de abrigo e impermeable: Lo mejor son las capas, incluida una capa exterior cortavientos/impermeable incluso en verano.
- Comida y agua: En la playa no hay nada de nada, así que llévate todo lo que necesites.
- Prismáticos: Van genial para ver animales, especialmente focas y pájaros.
- Cámara: Los colores de la playa merecen la pena capturarlos, sobre todo con marea baja.
- Mapa y GPS sin conexión: La cobertura móvil es fatal, así que descárgate mapas offline antes del viaje.
- Depósito lleno: Llena en Patreksfjörður, porque cerca de la playa no hay gasolineras.
- Tabla de mareas: Mira los horarios de marea para planificar cuándo ir a la playa.
Dónde quedarte
Aunque puedes ir a Rauðasandur como excursión de un día desde Patreksfjörður o Ísafjörður, quedarte cerca te permite disfrutar más tiempo de la playa con diferentes mareas y condiciones de luz:
- Camping de Melanes: Este camping al lado de Rauðasandur es básico, pero tiene sitios para tiendas con vistas brutales. Las instalaciones son súper básicas, pero tienen aseos, cocina y agua fría.
- Hotel Látrabjarg: A unos 30 km de Rauðasandur, este hotel de temporada tiene habitaciones cómodas y restaurante y es el alojamiento decente más cerca de la playa.
- Casa de Huéspedes Breiðavík: Cerca de los acantilados de Látrabjarg, esta casa de huéspedes tiene habitaciones y restaurante en un sitio súper tranquilo, como a una hora de Rauðasandur.
- Patreksfjörður: Este pueblo pequeño (a 33 km) tiene varias casas de huéspedes, hoteles y restaurantes y es una base práctica para explorar toda la zona.
Te recomiendo reservar con antelación durante el verano, porque hay pocas opciones y se llenan rápido.
Qué hacer y qué ver por la zona
Ya que vas a una zona tan remota, aprovecha al máximo el viaje explorando estas atracciones cercanas:
Acantilados de Látrabjarg
Solo a 30 km al oeste de Rauðasandur, Látrabjarg es el acantilado de aves más grande de Europa y es una visita obligada si vas a Rauðasandur. Estos impresionantes acantilados de 400 metros de altura se extienden 14 km y tienen millones de aves marinas, incluidos frailecillos, araos, guillemotes y gaviotas tridáctilas.
Látrabjarg es famoso por sus frailecillos que se dejan ver cuando anidan en lo alto de los acantilados de mayo a agosto. Muchas veces puedes acercarte bastante a estos pájaros, aunque hay que mantener una distancia respetuosa. Los acantilados tienen vistas al Atlántico y en días claros hasta puedes ver Groenlandia a lo lejos.
Patreksfjörður
El pueblo más cerca de Rauðasandur, Patreksfjörður, es una base excelente para explorar la zona. Este pequeño pueblo pesquero (unos 700 habitantes) tiene servicios básicos como supermercado, gasolinera, banco, piscina y varios restaurantes.
La Piscina de Patreksfjörður también merece la pena; como muchas piscinas islandesas, tiene agua termal y jacuzzis con vistas al fiordo. Para ver un poco de cultura local, mira a ver si hay eventos en el centro comunitario y prueba marisco fresco en alguno de los restaurantes locales.
Otras atracciones de los fiordos occidentales
La región de los fiordos occidentales tiene varias atracciones que están un poco más lejos de Rauðasandur pero a las que puedes llegar en coche conduciendo un poquito más:
- Museo Hnjótur: cerca de Örlygshöfn en la Ruta 612, este museo popular muestra historia local, herramientas de granja y cosas de aviación.
- Naufragio Garðar BA 64: En la carretera entre Brjánslækur y Patreksfjörður, encuentras este casco oxidado del barco de acero más antiguo de Islandia, que encalló en 1981.
- Fuente Termal Hellulaug: como a una hora en coche de Rauðasandur cerca de Flókalundur, esta piscina termal natural junto al mar es perfecta para relajarte después de un día explorando.
- Cascada Dynjandi: si vas más hacia el oeste por los fiordos occidentales, no te puedes perder esta cascada de varios niveles, que está como a 100 km al noreste de Rauðasandur. Es de las más espectaculares de todo el país.
Conclusión
Rauðasandur representa lo más mágico y salvaje de Islandia. Lejos de las hordas de turistas de la costa sur, esta playa roja remota te ofrece una experiencia de naturaleza pura, historia fascinante y una belleza tan rara que muy poca gente llega a ver.