Escondido en el noreste de Islandia está el Cañón Ásbyrgi, una maravilla natural que parece sacada de un libro de fantasía. Cuando lo visité en 2023, mis amigos y yo tuvimos el sitio casi para nosotros solos – éramos nosotros y otra familia nada más, explorando este enorme cañón con forma de herradura. Tras un paseíto de 20 minutos, llegamos a un estanque tranquilo al pie de unos acantilados altísimos. El silencio era total. Una calma sorprendente.
Si estás pensando en ir a Islandia y quieres huir de las masas de turistas mientras descubres algo realmente único, tienes que meter el Cañón Ásbyrgi en tu lista. Vamos a ver todo lo que necesitas saber sobre esta joya escondida.
Información clave
El Cañón Ásbyrgi es una pasada: tiene forma de herradura, con acantilados impresionantes, un bosque y un lago.
Se formó por inundaciones brutales hace milenios, aunque la leyenda dice que fue la huella del caballo de Odín.
Es un sitio genial para caminar, ver pájaros y acampar, lejos del bullicio.
Está cerca de Húsavík y es mejor visitarlo en verano, pero ojo con la ropa que te llevas porque el tiempo cambia en un segundo.
¿Qué es el Cañón Ásbyrgi?
El Cañón Ásbyrgi es como una enorme herradura hundida en el noreste de Islandia, dentro del Parque Nacional Vatnajökull. Y no es pequeño: tiene unos 3,5 km de largo y 1,1 km de ancho, con unos acantilados que se disparan hasta los 100 metros por todos lados.
Lo que hace que Ásbyrgi sea tan especial es su curiosa forma de herradura y todos los árboles verdes que cubren el suelo – algo que no ves mucho en los paisajes pelados típicos de Islandia. El cañón tiene un pequeño lago llamado Botnstjörn y está lleno de vegetación por todas partes. Un cambio agradable del típico terreno rocoso islandés.
En medio del cañón hay una formación rocosa llamada Eyjan ("la Isla") que se levanta 25 metros y divide el cañón en dos. Parece un barco gigante encallado en medio de un mar verde.
¿Cómo se formó el Cañón Ásbyrgi?
La historia de cómo se creó este cañón va toda de agua. Los científicos creen que unas inundaciones bestiales lo esculpieron hace unos 8-10 millones de años. Luego, otra inundación brutal hace unos 3.000 años terminó de darle la forma que vemos hoy.
Pero el folclore islandés tiene una versión mucho más interesante. Según la leyenda, el cañón lo formó Sleipnir, el caballo de ocho patas del dios nórdico Odín. Dicen que la huella gigante de su casco creó la forma de herradura. Mucho mejor para el pie de foto de Instagram, ¿no?
¿Por qué vale la pena visitar el Cañón Ásbyrgi?
El Cañón Ásbyrgi te ofrece algo completamente distinto a las típicas atracciones de Islandia. Te digo yo que merece la pena el viaje. Sin duda.
Un sitio tranquilo lejos de las hordas de turistas
Unas formaciones rocosas flipantes
Un montón de historias sobre elfos y gente oculta
Pájaros cantando por todas partes
Rutas para todos los niveles – desde paseos facilitos hasta caminatas que te dejan sin aliento
Árboles de verdad en un país donde casi no hay
Además de ser precioso, Ásbyrgi es un lugar especial para los islandeses. Muchos creen que es uno de los principales lugares donde viven los elfos y la gente oculta. Algunos lugareños juran que pueden ver y oír a estos seres mágicos escondidos por los rincones del cañón.
¿Dónde está exactamente el Cañón Ásbyrgi y cómo llegar allí?
El Cañón Ásbyrgi está en el noreste de Islandia, a unos 38 km al este de Húsavík. Forma parte de la zona de Jökulsárgljúfur del Parque Nacional Vatnajökull.
El cañón es una parada clave en el Círculo de Diamantes, una ruta chulísima que conecta varios sitios naturales alucinantes. Llegar no es complicado:
Desde Reykjavík: Son 7 horitas en coche, unos 541 km. Coge la Ruta 1 (la Ring Road), carretera principal que rodea la isla) hacia el norte y este, y luego la Carretera 85. Hacerlo todo en un día no tiene ningún sentido.
Desde Akureyri: Mucho más cerca – solo 153 km y unas 2,5 horas por la Carretera 85. Perfecto para una escapada de un día.
Desde Egilsstaðir: Unos 190 km y unas 3 horas. Se puede hacer en un día.
La carretera que lleva al cañón (Carretera 85) está abierta todo el año. Pero ojo con conducir en invierno, que puede ser complicado. Un consejo: pilla un 4×4 durante los meses fríos – las carreteras heladas no son broma.
Cuando llegues, encontrarás el Centro de Visitantes de Ásbyrgi (Gljúfrastofa). Tienen baños, sitios para rellenar agua y una tiendecita de recuerdos. La gente que trabaja allí es majísima si necesitas consejos.
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¿Cuál es el mejor momento para visitar el Cañón Ásbyrgi?
El verano (junio a agosto) es la mejor época para ir al Cañón Ásbyrgi. Hace buen tiempo. Los días son larguísimos, y todo está abierto.
En verano:
Todos los senderos están accesibles
Todo está verde y lleno de vida
Hay pájaros por todas partes, sobre todo cerca del lago
El centro de visitantes abre todos los días de 11:00 a 17:00
Puedes acampar en la zona
El sol apenas se pone, así que tienes un montón de horas para explorar
Cada temporada tiene su encanto:
Primavera (abril-mayo): Menos gente y la naturaleza empezando a despertar. Hay algunas zonas embarradas que esquivar.
Verano (junio-agosto): El mejor tiempo pero más visitantes (aun así, muchísimos menos que en los sitios famosos).
Otoño (septiembre-octubre): Colores preciosos en el bosque, temperaturas más frescas y casi ningún turista.
Invierno (noviembre-marzo): Acceso limitado y algunas carreteras cerradas. Necesitarás un 4×4 sí o sí, y mejor que compruebes el estado de las carreteras antes de salir. El cañón está precioso cubierto de nieve, pero la mayoría de los servicios están cerrados.
El tiempo en Islandia cambia de repente, así que siempre mira la previsión antes de ir. Un minuto está soleado y al siguiente está diluviando. Típico de Islandia.
¿Qué ponerse para ir al Cañón Ásbyrgi?
El tiempo en Islandia es una locura impredecible, así que vestirse por capas es tu mejor apuesta en el Cañón Ásbyrgi. Mete esto en tu mochila:
Botas de montaña impermeables o zapatillas resistentes – el suelo se pone resbaladizo
Un chubasquero – puede llover sin previoaviso en cualquier momento
Capas que puedas quitar o poner – una camiseta, un forro polar, una chaqueta
Gorro y guantes – sí, incluso en verano (hazme caso)
Gafas de sol – ese sol bajo del norte puede dejarte ciego
Una mochilita para agua, algo de picar y ropa extra
La cámara – pero métela en una bolsa impermeable cuando no la uses
En verano la temperatura suele estar entre 10-15°C (50-59°F), mientras que en invierno puede bajar bajo cero. El cañón se siente más frío que otros sitios por toda la sombra que hay. Llévate una capa extra – ya me lo agradecerás.
Si vas a hacer las rutas más largas, necesitas ir bien equipado – mapa, brújula o GPS, y suficientes provisiones para mantenerte con energía.
Qué hacer y ver en el Cañón Ásbyrgi
El Cañón Ásbyrgi tiene un montón de cosas para mantenerte entretenido. Estas son las que no te puedes perder:
Excursión al Lago Botnstjörn
Este es el estanque que visité con mis amigos en 2023. Es un paseo facilísimo de 20 minutos – solo 1 km cada dirección si aparcas en el parking que está más cerca del lago. Perfecto para casi cualquiera. El camino pasa entre unos abedules preciosos y te lleva a un estanque tranquilísimo al pie de unos acantilados enormes. El agua suele estar como un espejo, reflejando los acantilados que lo rodean. ¡Es un paraíso para los fotógrafos! Este paseíto te da una idea del cañón sin que tengas que sudar la gota gorda.
Subir a Eyjan para flipar con las vistas
¿Quieres algo más de desafío? La ruta de Eyjan de 4,5 km lleva unas 2 horas ida y vuelta, subiendo a lo alto de esa formación rocosa que parte el cañón en dos. Las vistas son una locura. Merece cada paso.
Hay algunas partes empinadas y bordes de acantilado, así que ojo si tienes vértigo o vas con peques. Desde arriba ves toda la forma de herradura desplegada bajo tus pies. No te olvides la cámara.
Conocer las historias de elfos del cañón
Ásbyrgi no es solo bonito – está lleno de leyendas. Los islandeses creen que es la capital de los elfos y la gente oculta.
Algunos visitantes dicen que sienten una energía especial, sobre todo cerca de las paredes del cañón. Creas o no en los elfos, estas historias le dan otro punto a tu visita. Habla con la gente del centro de visitantes – les flipa contar estas historias.
Recorrer el sendero del bosque Skógarstígur
Esta ruta de 4 km te lleva 1-2 horas y te muestra el suelo del bosque del cañón. El camino es mayormente llano y fácil.
En primavera se ven florecillas por todas partes. En otoño, los abedules se vuelven de colores alucinantes. El bosque da buena sombra en días calurosos (sí, en Islandia a veces hace calor) y te protege si no llueve mucho.
Ver pájaros
A los pájaros les encanta este sitio, sobre todo alrededor del lago. Llévate unos prismáticos si te gusta observarlos. Puedes ver:
Patos chapoteando
Cuervos volando en lo alto
Zorzales cantando en los árboles
Fulmares del norte si tienes suerte
La mañana es el mejor momento para ver pájaros – están más activos y hay menos gente en el cañón. Pregunta en el centro de visitantes qué se ha visto últimamente.
En verano puedes acampar en Ásbyrgi y flipar con el Sol de Medianoche. El camping tiene todo lo básico:
Enchufes para cargar tus cacharros
Agua caliente y fría
Baños limpios
Un montón de sitio para tiendas y autocaravanas
Quedarte a dormir te permite ver el cañón cuando los turistas ya se han largado. La luz a medianoche crea un ambiente casi mágico en las paredes del cañón. Acampar cuesta unos 2.500 ISK (unos 18€) por persona y noche – muchísimo más barato que los hoteles islandeses.
Hacer la ruta completa del cañón
Para los más cañeros, existe una ruta de 32 km desde Ásbyrgi hasta la cascada Dettifoss. Es una aventura de dos días atravesando algunos de los paisajes más salvajes de Islandia.
Esto no es para novatos – necesitas buen equipo y estar en forma. El sendero te enseña cómo el agua ha moldeado toda esta zona. Hay sitios para acampar por el camino. ¿La recompensa? Algunas de las vistas más espectaculares del país.
Fotografía a distintas horas
La luz cambia el ambiente del cañón a lo largo del día:
Por la mañana: Misterioso y con niebla, que a menudo sale del lago
A mediodía: Vistas claras de todos los detalles de los acantilados
Al atardecer: Luz dorada que hace que todo el cañón brille
A medianoche (en verano): Una luz suave y de ensueño que vuelve locos a los fotógrafos
Los mejores sitios para fotos son los miradores del borde del cañón, las orillas del lago y la cima de Eyjan si te animas a subir.
Conclusión
El Cañón Ásbyrgi ofrece una mezcla perfecta de naturaleza, cultura y diversión al aire libre que hace que valga la pena el viaje al noreste de Islandia. A diferencia de los lugares famosos del país, puedes tener esta impresionante maravilla casi para ti solo, como me pasó a mí en 2023.
Mientras planeas tu viaje a Islandia, añade esta joya del noreste a tu lista. Podría convertirse en tu parada favorita.
