Vista aérea de un faro naranja en una península rocosa, con una playa de arena negra, montañas oscuras y olas agitadas del océano bajo un cielo nublado.
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Aron Freyr

El Faro de Hvalnes en el Este de Islandia: todo lo que necesitas saber

En la costa sureste de Islandia hay un faro naranja que casi todo el mundo se salta al pasar en coche. Craso error. El faro de Hvalnes está rodeado de algunos de los paisajes más espectaculares del país: montañas afiladas, playas de guijarros negros y el Atlántico Norte estrellándose contra las costas volcánicas.

No es uno de esos sitios masificados de turistas. En Hvalnes puedes estar tranquilo sin pelearte con las multitudes para hacer fotos. Incluso es posible que tengas el lugar entero para ti solo.

Información clave

  • Fácil acceso: justo al lado de la Ring Road con parking gratuito y un paseo cortito hasta el faro
  • Cuándo ir: verano (junio-agosto) para buen tiempo y fauna; invierno para auroras boreales
  • Qué te encontrarás: un faro naranja espectacular, playa de guijarros negros y vistas de la montaña Eystrahorn
  • Cuánto tiempo necesitas: entre 30 minutos y 2 horas, según lo que quieras explorar
  • Sin servicios: Trae todo lo que necesites - no hay baños, tiendas ni cafeterías
  • Combinación perfecta: Ideal para combinar con Vestrahorn y Höfn para cenar bogavante

¿Qué es el faro de Hvalnes?

El faro de Hvalnes es una torre de hormigón de 11,5 metros, pintada de un naranja chillón, que guía barcos desde 1954 en la Reserva Natural de Hvalnes. Desde 1982 funciona con electricidad y emite dos destellos blancos cada 20 segundos, aunque solo se puede visitar por fuera. Su contraste con los guijarros volcánicos negros y los picos del Eystrahorn lo convierte en un lugar especialmente fotogénico.

El faro de Hvalnes (Hvalnesviti en islandés) es una torre de hormigón de 11,5 metros, pintada de un naranja chillón, que lleva guiando barcos desde 1954. El nombre "Hvalnes" significa "Península de la Ballena", porque antes las ballenas varaban aquí y servían de alimento a los pueblos de la zona.

El faro está en la Reserva Natural de Hvalnes, en una pequeña península con la montaña Eystrahorn alzándose justo detrás. El conjunto parece de otro mundo, lo que explica por qué cada vez lo ves más en Instagram.

Al principio funcionaba con gas hasta que en 1982 lo cambiaron a electricidad. Ahora va solo, lanzando dos destellos blancos cada 20 segundos para avisar a los barcos de este tramo peligroso. No se puede entrar, pero sí acercarse y curiosear por los alrededores.

Lo que hace especial este sitio es el contraste: esa torre naranja brillante contra los guijarros volcánicos negros, con los picos del Eystrahorn de fondo creando una postal espectacular. Es uno de esos lugares que te hace entender por qué Islandia engancha tanto.

¿Por qué visitar el faro de Hvalnes en lugar de otras atracciones de Islandia?

Hvalnes ofrece una calma que no encontrarás en los lugares más famosos de Islandia, donde suele haber mucha gente, y aquí a menudo estás solo con las olas y las gaviotas. Además, está justo al lado de la Ring Road, así que no requiere caminatas largas ni 4x4, y en un mismo sitio tienes faro, playa negra, fauna y paisajes montañosos. Y lo mejor es que la mezcla del faro naranja con la playa oscura y los picos del Eystrahorn te permite sacar fotos realmente únicas.

Los sitios famosos de Islandia están hasta arriba de gente. En Reynisfjara hay colas y cuerdas de seguridad. La laguna glacial de Jökulsárlón recibe autobuses de turistas durante todo el día. Hasta los rincones más pequeños se están llenando de gente.

Hvalnes es otra historia. Es muy posible que te lo encuentres vacío, sobre todo si vas muy temprano o al atardecer. Estar en este faro, en medio de la nada, solo con las olas y las gaviotas, es algo que marca.

Además, está súper bien comunicado si vas por la Ring Road. A diferencia de otros sitios remotos que te obligan a caminar durante horas o a ir en 4x4, Hvalnes está justo al lado de la carretera principal. Paras, caminas cinco minutos y ya tienes delante uno de los faros más bonitos de Islandia.

Y encima aquí tienes muchas cosas diferentes que hacer. En unos pocos kilómetros tienes el faro, una playa negra preciosa para pasear, animales que ver y algunos de los mejores paisajes montañosos de Islandia. Básicamente, cuatro planes en uno.

Y la verdad es que en Kirkjufell o en Diamond Beach, todo el mundo hace la misma foto. En Hvalnes capturas algo único. La mezcla del faro naranja, la playa oscura y los picos del Eystrahorn crea fotos que no vas a encontrar en ningún otro lugar.

Faro rojo sobre un cabo rocoso, con un oscuro océano, playa de arena negra y montañas bajo un cielo nublado.

Dónde está y cómo llegar

El faro de Hvalnes está en la costa sureste de Islandia, entre Höfn y Djúpivogur, y queda a unos 500 km de Reikiavik por la Ring Road. Llegar es sencillo: sigues la Ruta 1, tomas el pequeño desvío a Hvalnes y recorres una pista corta antes de caminar un par de minutos hasta el faro. La carretera está en buen estado, no necesitas 4x4 y, como no hay transporte público, lo ideal es ir en coche desde los pueblos cercanos, que quedan a unos 45 minutos.

El faro de Hvalnes está en la costa sureste de Islandia (coordenadas 64°21'10.8"N 14°36'46.8"O). Queda entre dos pueblos: Höfn (50 km al oeste) y Djúpivogur (54 km al noreste).

Desde Reikiavik son unos 500 kilómetros y entre 6 y 7 horas por la Ring Road. La mayoría de gente hace el viaje en varios días, parando en cascadas, glaciares y playas de arena negra. Es mucho más inteligente hacer eso que meterte el palizón.

Cómo llegar:

  • Sigue la Ring Road (Ruta 1) hacia el este desde Reikiavik
  • Pasa Höfn y continúa hacia el noreste unos 45 minutos
  • Busca un cartelito que pone "Hvalnes" a la derecha
  • Gira por la pista de tierra (es cortita, unos 500 metros)
  • Aparca en el pequeño parking y camina 2-3 minutos hasta el faro

El desvío se pasa fácil si no vas atento. Lo verás justo después de que aparezca la montaña Eystrahorn delante. Si de repente vas alejándote de la costa, te has pasado.

  • Estado de las carreteras: La Ring Road está asfaltada completamente. La pistita de tierra hasta el faro va bien con cualquier coche, no hace falta 4x4. En invierno, solo ve despacio si hay hielo o nieve.
  • Transporte público: Ni lo sueñes. Estamos en el medio de la nada islandesa. Te hace falta coche de alquiler o un tour que pase por aquí (aunque casi ninguno lo hace).

Desde pueblos cercanos:

  • Höfn: 45-50 minutos al noreste
  • Djúpivogur: 45 minutos al suroeste
  • Jökulsárlón: hora y media al suroeste

Qué hacer allí

Hvalnes es un sitio para disfrutar de la naturaleza: hacer fotos del faro naranja con la playa negra y el Eystrahorn, pasear por los guijarros volcánicos e incluso ver auroras en invierno. También puedes encontrarte frailecillos, charranes o alguna foca mientras exploras la zona con calma. Y si te apetece caminar un poco más, la costa y las laderas bajas del Eystrahorn ofrecen rutas cortas con vistas preciosas, aunque el terreno es salvaje y sin señalizar.

No esperes parques temáticos. Hvalnes va de conectar con la naturaleza salvaje de Islandia en estado puro, y precisamente eso es lo que lo hace tan especial.

Fotografía y paisajes

Este faro está hecho para las fotos. Ese naranja chillón queda genial con cualquier fondo: cielos de tormenta, días azul radiante, la playa de guijarros negros o el suelo nevado.

Date una vuelta para pillar diferentes ángulos. La mayoría fotografía el faro con la montaña Eystrahorn detrás. Pero prueba a agacharte en la playa con los guijarros oscuros en primer plano, o pilla el faro de lado con las olas cerca.

La hora previa al atardecer aquí es brutal. La torre naranja se enciende y, con suerte, el Eystrahorn también se ilumina de maravilla. En verano esto pasa bastante tarde (sobre las diez de la noche en junio y julio).

Para fotos nocturnas, Hvalnes es perfecto para auroras boreales en invierno. Sin apenas contaminación lumínica, puedes cazar la aurora iluminando el faro y el océano. Solo trae trípode y abrígate bien.

Paseos por la playa y exploración

La playa de guijarros negros se extiende kilómetros en ambas direcciones. No son guijarros cualesquiera: son piedras volcánicas lisas y oscuras pulidas por siglos de oleaje atlántico. Caminar aquí es como pisar algo que la naturaleza ha estado perfeccionando durante siglos.

Ve hacia el sur del faro para el tramo más largo de playa. Puedes andar 30-40 minutos antes de que la playa gire hacia una zona de laguna. Es súper relajante, solo el ruido de las olas rodando sobre las piedras.

Te encontrarás maderas flotantes curiosas, conchas y hasta la rara "planta ostra" (Mertensia maritima), una planta de flores azules que sabe literalmente a ostras. Pero no la cojas; cada vez queda menos por culpa de la gente que se la lleva en otros sitios.

Ver animales

La Reserva Natural de Hvalnes tiene más que paisajes bonitos. Los acantilados, la playa y los humedales de alrededor atraen un montón de pájaros y vida marina.

Pájaros que puedes ver:

  • Frailecillos (junio-agosto) - búscalos en lo alto de los acantilados con hierba
  • Charranes árticos - preciosos pero agresivos si te acercas a sus nidos
  • Gaviotas tridáctilas, gaviotas normales y fulmares por los acantilados
  • A veces cisnes cantores en la zona de la laguna

Vida marina:

  • Las focas a veces se tumban en las rocas de fuera
  • Las ballenas son raras, pero alguna vez se ven en aguas más profundas

Trae prismáticos si tienes. Los pájaros están más activos por la mañana temprano o al atardecer. Y acuérdate: mantén las distancias, sobre todo en época de cría (mayo-agosto).

Caminatas cortas y explorar

Puedes curiosear por el faro e incluso acercarte a la montaña Eystrahorn si quieres ver más, pero no hay senderos marcados.

Lo más fácil es seguir la costa hacia el norte o el sur desde el faro. El terreno es bastante llano con alguna colina bajita. Verás la montaña y la costa desde diferentes sitios.

¿Buscas algo más movido? Puedes subir un poco por las laderas bajas del Eystrahorn. No hay sendero oficial, pero hay caminos de ovejas y rutas trilladas que suben. Incluso una subida de 20-30 minutos te da unas vistas espectaculares de la península y el océano.

Eso sí, ten en cuenta que es terreno salvaje sin señalizar. No te metas en líos si no tienes equipo ni experiencia. El tiempo cambia rápido y la ayuda está lejos.

Información práctica para visitantes

En Hvalnes el clima va por libre: en verano hace más suave y hay muchísima luz, en otoño llegan los cielos dramáticos, en invierno el frío y las auroras, y en primavera puedes tener sol o nieve en el mismo día. Lleva ropa impermeable y de abrigo, buenas botas, comida, agua y tu equipo de cámara, porque no hay servicios cerca. Y por seguridad, mantente lejos de las olas, controla el tiempo, ve con cuidado por la playa de guijarros, respeta a los animales y ten en cuenta que la cobertura es mala, sobre todo en invierno.

Clima y cuándo ir

El tiempo en Islandia es famoso por ser impredecible y Hvalnes se lleva todo lo que le manda el Atlántico Norte. Esto es lo que te puedes encontrar:

Verano (junio-agosto): Es cuando mejor tiempo hace. Las temperaturas rondan los 10-15 °C durante el día. Tienes casi 24 horas de luz en pleno verano, genial para sesiones de fotos de madrugada. Los frailecillos y otros pájaros marinos están criando, así que es la mejor época para ver fauna.

Otoño (septiembre-octubre): Menos turistas, pero el tiempo se vuelve más loco. Ideal para fotos con cielos dramáticos. Vuelve la noche, así que puedes pillar auroras boreales si está despejado.

Invierno (noviembre-marzo): Hace frío (sobre 0°C) con pocas horas de luz, pero brutal para fotos de auroras boreales. El faro nevado con la aurora encima queda increíble, pero necesitas equipo de invierno en serio y cuidado con el hielo.

Primavera (abril-mayo): El tiempo va a su bola. Puedes tener días soleados y tranquilos o tormentas de nieve de repente. Los pájaros migratorios empiezan a volver, pero sigue haciendo bastante frío.

Cuándo ir durante el día: Muy temprano para estar solo y tener mejor tiempo. Al atardecer para buena luz y menos gente. Al mediodía puede ser duro para fotos, pero verás todo perfectamente.

Qué llevar

Imprescindibles:

  • Chaqueta y pantalones impermeables (en serio, no es negociable)
  • Ropa de abrigo por capas: jersey de lana o polar, incluso en verano
  • Botas de montaña impermeables que agarren bien
  • Gorro y guantes (los vas a necesitar más de lo que piensas)
  • Cámara y pilas de repuesto (el frío las mata rápido)
  • Comida y agua - no hay nada en kilómetros

Para fotógrafos:

  • Trípode para exposiciones largas y fotos de auroras
  • Bayeta para limpiar objetivos (el rocío marino se mete en todo)
  • Filtro polarizador para quitar reflejos del agua y las rocas mojadas
  • Tarjetas de memoria de sobra

También lleva:

  • Papel higiénico (no hay baños, ¿recuerdas?)
  • Gel hidroalcohólico
  • Bolsas para llevarte toda la basura
  • Mapas offline bajados al móvil

Consejos de seguridad

Hvalnes puede parecer tranquilo, pero la costa islandesa tiene sus peligros. Así te mantienes a salvo:

  • Cuidado con el mar: nunca le des la espalda a las olas. Las "olas traidoras", olas enormes que aparecen de la nada, pueden tumbarte o arrastrarte al agua. Mantente al menos a 20 metros del agua, sobre todo si hay oleaje fuerte.
  • Ojo con el tiempo: las condiciones cambian en minutos. Si entra niebla, no ves ni tu mano. Los vientos fuertes te pueden tumbar. Si el tiempo empeora, vuelve al coche y espera.
  • Cuidado con el terreno: la playa de guijarros es irregular y las piedras se mueven. Ve con calma y mira dónde pisas. Si trepas por rocas o colinas, cuidado con dónde pisas; la roca volcánica puede estar suelta.
  • Respeta la fauna: no te acerques a focas, pájaros ni ningún animal. Los charranes árticos te atacan si te acercas a sus nidos. Lleva a los perros atados para que no molesten a los pájaros que están criando.
  • Por si acaso: la cobertura de móvil es malísima. Dile a alguien adónde vas y cuándo vuelves. La ayuda más cercana está en Höfn o Djúpivogur, a más de 45 minutos.
  • En invierno: Si vas en invierno, mira el estado de las carreteras antes de salir. Lleva ropa de abrigo extra, comida y agua por si te quedas tirado. El hielo puede hacer el paseo hasta el faro muy peligroso.
Dos personas con chaquetas rojas están de pie en una orilla nevada mirando un lago parcialmente congelado y montañas cubiertas de nieve.

Sitios cercanos que visitar

Hvalnes tiene sitios muy buenos cerca: Vestrahorn y Stokksnes están a unos 40 minutos y mezclan dunas negras, reflejos increíbles y un decorado vikingo. Justo detrás del faro está el Eystrahorn, casi siempre vacío, y a 45 minutos tienes Höfn para probar bogavante y Djúpivogur con sus famosos huevos de piedra. Si te apetece ver más, Jökulsárlón y Diamond Beach quedan a hora y media y la laguna Lón está a solo 5–10 minutos para paseos tranquilos y observación de aves.

Lo bueno de Hvalnes es que está cerca de otros sitios increíbles. Fácilmente puedes ver varios en un día o dos.

Montaña Vestrahorn y Stokksnes

A unos 40 minutos al oeste de Hvalnes, probablemente la montaña más fotografiada de Islandia (después de Kirkjufell). El Vestrahorn (el "Cuerno Oeste") se alza espectacularmente desde unas dunas de arena negra, creando reflejos perfectos en los charcos de marea.

Hay una entrada pequeña (sobre 1.000 coronas) para acceder a la península de Stokksnes, que pagas en el Viking Café. Merece totalmente la pena por los paisajes brutales y por ver un decorado de película de "The Northman", una réplica de pueblo vikingo que está cerca de la montaña.

El Viking Café es un sitio acogedor para tomar café y gofres, con vistas increíbles. Ideal para entrar en calor después de luchar contra los vientos costeros.

Qué hacer: Fotos, paseos por la playa, explorar el decorado vikingo y subir hasta el faro de Stokksnes en la punta de la península.

Dunas de arena negra con hierba escasa, montañas escarpadas y océano bajo un cielo dramático.

Montaña Eystrahorn

Este pico espectacular se alza justo detrás del faro de Hvalnes y merece un vistazo. Lo llaman el "Cuerno Este" y, en realidad, es más escarpado que su famoso primo occidental.

A diferencia del Vestrahorn, al Eystrahorn no va casi nadie, así que a menudo lo tienes para ti solo. La montaña es de roca de gabro antigua con trazas de oro y plata. No es que vayas a encontrar pepitas, pero, geológicamente, es fascinante.

Qué hacer: fotos desde diferentes ángulos, paseos cortos por la base para distintas perspectivas y ver las formaciones rocosas curiosas.

Una montaña escarpada y cubierta de nieve se eleva de un paisaje árido y dorado con un camino de tierra serpenteante y un lago tranquilo bajo un cielo azul.

Höfn - La capital del bogavante

Esta ciudad pesquera, a 45 minutos al oeste de Hvalnes, es famosa en toda Islandia por sus cigalas (bogavante noruego). Si te va el marisco, reserva al menos una comida aquí.

Restaurantes que no te puedes perder:

  • Pakkhús Restaurant: Cocina elegante en un almacén reconvertido junto al puerto
  • Humarhöfnin: Se especializa en platos de bogavante sencillos pero perfectos
  • Hafnarbúðin: Sitio informal famoso por su bocadillo de bogavante

Höfn también tiene gasolinera, supermercado y sitios donde dormir. Es tu última parada con servicios antes de meterte en zonas perdidas.

Varios barcos atracados en un puerto tranquilo con reflejos, respaldados por edificios y montañas nevadas.

Djúpivogur

En este pueblo (también pesquero) a 45 minutos al noreste de Hvalnes parece que el tiempo pasa más lento. Lo más llamativo son los "Eggin í Gleðivík", 34 huevos enormes de piedra que representan especies de pájaros locales, obra del artista Sigurður Guðmundsson.

Qué ver:

  • El puerto con sus casas de colores
  • Centro Cultural Langabúð en un almacén de 1790
  • Restaurante Hótel Framtíð para pescado fresco en ambiente acogedor
Un pueblo costero con edificios coloridos se asienta ante inmensas montañas nevadas bajo un cielo azul despejado.

Laguna glacial Jökulsárlón

A hora y media al oeste de Hvalnes, Jökulsárlón es la laguna glacial más famosa de Islandia donde los icebergs flotan tranquilos antes de irse al mar. Al lado está Diamond Beach, donde los trozos de hielo de la laguna llegan a la arena negra. A mí no me encanta, comparándola con otros sitios del país, pero ya que estás allí, no dejes de ir.

Si no has pasado ya por allí de camino a Hvalnes, merece la pena hacer el viaje. En verano hay excursiones en barco para ver los icebergs y las focas de cerca.

Icebergs azules reflejándose en aguas tranquilas al atardecer, con montañas nevadas en la distancia.

Laguna Lón y zona natural

Mucho más cerca de Hvalnes (solo 5-10 minutos), esta laguna poco profunda es perfecta para ver pájaros. Cisnes cantores, gansos y varias aves costeras pasan por aquí, sobre todo durante la época de migraciones.

La zona ofrece paseos fáciles por terreno llano, con buenas vistas a Hvalnes y las montañas. Es un sitio tranquilo que casi todo el mundo se salta.

Conclusión

El faro de Hvalnes te enseña lo que hace grande a Islandia: paisajes espectaculares, historia rica y esa sensación de haber encontrado algo especial. No tiene la fama de Gullfoss o la Laguna Azul, pero precisamente por eso es genial.

Preguntas frecuentes sobre el faro Hvalnes

Sí. Hvalnes resulta muy espectacular con tormenta o cielo cubierto, ya que las olas y las nubes bajas crean un ambiente perfecto para fotos. Solo mantén distancia del mar y ten cuidado con el viento.

Sí, por lo general se puede, pero debes respetar la normativa islandesa: mantener siempre el dron a la vista, evitar molestar a la fauna y alejarte especialmente de las aves durante la época de nidificación.

Apenas 2–3 minutos. El camino es corto, llano y accesible para la mayoría de visitantes.

No. La visita al faro, la playa y la zona protegida es completamente gratuita.