
Descubriendo Egilsstaðir, la capital de Islandia Oriental
Islandia Oriental es una región que muchos viajeros se saltan durante su viaje, pasando por alto una zona en la que la naturaleza se muestra en modos sorprendentes y donde la cultura islandesa se puede palpar de veras, lejos de las típicas trampas para turistas.Y su capital, Egilsstaðir, representa el espíritu de la región.
Situada en el centro de esta área, a orillas de un lago precioso, es la puerta de entrada a fiordos, bosques y cascadas que componen la región. Está, además, muy bien conectada por carretera, junto a la Ring Road, por lo que es una parada fantástica en un viaje a través del país.
Información clave
- Egilsstaðir es la capital de Islandia Oriental, Austurland en islandés.
- A pesar de su poca población, la ciudad es un importante centro cultural.
- Islandia Oriental es principalmente conocida por ser el hogar de los Fiordos Orientales.
¿Por qué merece la pena visitar Egilsstaðir?
Egilsstaðir es el asentamiento de mayor tamaño de Islandia Oriental, llamada en lengua local Austurland. La región tiene bastante extensión, pero muy poca población. De hecho, la ciudad tiene apenas 2.500 habitantes. La sensación general que tienen los viajeros que vienen a esta región es una mezcla de libertad y aislamiento. Un sitio que puede explorarse sin apenas cruzarte con ningún otro turista.
La ciudad en sí es de tamaño compacto, con servicios básicos como tiendas, un hospital y un aeropuerto. Por ello, es el sitio perfecto para usar como base y recorrer Islandia Oriental. No es solo la ciudad más completa de la zona, sino que tiene una ubicación muy centrada dentro de la región. De hecho, la Ring Road (Ruta 1), la carretera más importante del país, pasa por la ciudad. Geográficamente, Egilsstaðir está en el valle de Fljótsdalshérað, rodeada de tierras fértiles y montañas que crean un fondo precioso de llanuras verdes y picos escarpados.
A nivel histórico, Egilsstaðir es bastante joven, ya que se fundó en 1947 como un centro de servicios para las granjas y plantas pesqueras de la zona. Antes de eso, hay vestigios de los primeros colonos nórdicos y se han hallado ruinas y edificios históricos, como el monasterio de Skriðuklaustur, muy cerca de la ciudad, que data del siglo XV. Este antiguo edificio religioso alberga hoy en día un museo que exhibe artefactos medievales y una exposición sobre el escritor islandés Gunnar Gunnarsson, quien vivió en la ciudad en el siglo XX. Islandia Oriental es la zona de la isla a la que primero llegaron los colonos vikingos y en ella hay varios restos de asentamientos.
Uno de los elementos más atractivos de la ciudad es su folclore. La ciudad se construyó a orillas del lago Lagarfljót, que es muy famoso en Islandia. La razón principal, aparte de su belleza, es la leyenda del Lagarfljótsormur, una criatura mitológica con forma de serpiente que se dice que vive en las profundidades del lago. Una historia muy parecida a la del monstruo del lago Ness, en Escocia. Hay registros de supuestos avistamientos que datan del siglo XIV. Esto añade un punto de misterio al pintoresco lago y la gente se da un paseo en barco por sus aguas o a pie por la orilla con la esperanza de verlo. El lago también es muy apreciado por los amantes de la ornitología, con especies como el colimbo chico, que habita en sus orillas.
A nivel cultural, Egilsstaðir celebra cada año un festival de jazz y varios conciertos de música electrónica, lo que da muestra de su vibrante escena cultural a pesar de su ubicación remota. El museo de la ciudad tiene ejemplos de casas con tejado de hierba tradicionales de Islandia. Si buscas un medio ambiente precioso, a pocos minutos del centro de la ciudad está Hallormsstaður, también llamado Hallormsstaðaskógur, el bosque más grande de Islandia, que se plantó hace algo más de un siglo.
En general, Egilsstaðir es un destino estupendo para los que buscan tranquilidad, historia y acceso a los monumentos naturales del este de Islandia.

Dónde comer en Egilsstaðir
Aunque Egilsstaðir no sea una gran ciudad, tiene un buen número de opciones para salir a comer. Los restaurantes y cafeterías que hay suelen basar sus recetas en ingredientes de la zona, con especial hincapié en pescado fresco y cordero. Hay opciones para todos los gustos, desde los más sencillos hasta los más formales.
El restaurante Gistihúsið tiene un menú muy amplio, que va desde hamburguesas a platos orientales. Sus especialidades son el cordero, el pescado y el marisco, todos hechos con ingredientes de la zona. Tienen una amplia selección de postres, muchos de los cuales llevan skyr, un tipo de yogur típico de Islandia.
El restaurante Glóð ofrece mucha variedad, desde pizzas y pastas a carne a la parrilla y sopas de marisco. El local es muy cálido y agradable.
Salt Café & Bistro tiene comidas ligeras y café. Es conocido por sus sándwiches y empanadas con sabores típicos de la región. Es una opción más económica.
El fish & chips es una comida muy popular en Islandia. Si te gusta, prueba Kjot&fiskur Fresh Fish, que utiliza pescado fresco de los fiordos. Tiene platos sencillos como bacalao frito y patatas fritas.
La pizzería Askur sirve pizzas cocinadas en horno de leña con un toque islandés, con ingredientes como quesos autóctonos y hierbas aromáticas de la zona o carne picada de reno.
Dónde dormir en Egilsstaðir y alrededores
Como sucede con los restaurantes, hay un buen número de opciones en Egilsstaðir. Las hay para todos los gustos y presupuestos, desde hoteles con muy buenos servicios a casas de huéspedes más sencillas y campings.
Si buscas un hotel cómodo, prueba el Hérað Hotel, que ofrece habitaciones modernas de diseño sencillo. Tiene un restaurante y vistas a las colinas de alrededor y está en el centro de la ciudad.
Lyngás Guesthouse, también en el centro, tiene habitaciones limpias a buen precio con instalaciones compartidas, como cocina, ideal para los que viajan vigilando el bolsillo.
El Hotel Eyvindará, a las afueras de la ciudad, tiene habitaciones y también cabañas de estilo rústico. Está rodeado de naturaleza, con acceso a varios senderos. También cuenta con jacuzzis.
Si prefieres acampar, el camping de Egilsstaðir está muy cerca del lago y está equipado con parcelas para tiendas y caravanas. Tiene instalaciones básicas como aseos, duchas y cocina.
Cerca, en Hallormsstaður, el bosque más grande de Islandia, hay un camping a la orilla del lago Lagarfljót. Es un establecimiento familiar con aseos, duchas, electricidad, zona de barbacoa, mesas al aire libre y zona de juegos para niños.
Estas son solo algunas opciones, pero hay unas cuantas más.
Dónde está Egilsstaðir y cómo llegar
Como ya hemos comentado, Egilsstaðir está en el este de Islandia, a 640 kilómetros de Reikiavik por la Ring Road o Ruta 1. Si vas desde la capital, es un viaje largo, pero puedes planificar una ruta haciendo un par de paradas y hacer un viaje por carretera por el país.
La mejor manera de llegar a Egilsstaðir es en coche, lo que da flexibilidad para parar a ver cosas por el camino. Como la Ring Road pasa por la ciudad, la ruta es muy sencilla de seguir. Solo hay que ir por la Ruta 1 hasta llegar.
Desde Reikiavik hay dos opciones. Puedes elegir ir por el norte o por el sur de la isla. La distancia es muy parecida. La ruta norte tiene 640 kilómetros, mientras que la sur son 690 kilómetros. Puedes decidir cuál escoger según lo que quieras ver por el camino. En ambos casos se tarda entre 8 y 9 horas sin parar.
Hay vuelos nacionales desde Reikiavik hasta el aeropuerto de Egilsstaðir y se tarda una hora. Si prefieres el transporte público, hay autobuses a diario, pero tardan más: unas 10 horas desde la capital. Ten en cuenta que el servicio puede cancelarse en invierno o si el clima es muy malo. No obstante, una vez que llegues vas a necesitar un coche para moverte por la zona y las opciones de alquiler en Islandia Oriental son mucho más limitadas.
Qué ver y hacer cerca de Egilsstaðir
El este de Islandia destaca por estar bastante aislado, con fiordos profundos que cortan la costa y montañas que se elevan verticalmente sobre el mar. Esta región, menos visitada que el sur o el oeste, tiene coloridos pueblos de pescadores, colonias de frailecillos y rebaños de renos pastando en las tierras altas. Hay mucho que ver en esta región y Egilsstaðir es la base ideal desde la que explorarlo todo.
Lagarfljót
Con una longitud de 25 kilómetros, Lagarfljót es un lago estrecho junto a Egilsstaðir. Sus aguas tranquilas reflejan las colinas de alrededor y la leyenda del Lagarfljótsormur, el monstruo que supuestamente vive allí, le añade un punto de intriga. Aunque es bastante improbable que veas a la criatura, es un sitio precioso. Puedes hacer un tour en barco o recorrer la orilla en bicicleta o a pie por uno de los muchos senderos que rodean el lago. Es un sitio muy popular para ver aves, con varias especies de patos y cisnes nadando sobre el agua.

Baños de Vök
Por suerte, el que probablemente sea el mejor balneario de Islandia Oriental está tan solo a cinco kilómetros de Egilsstaðir. Los Baños de Vök tienen piscinas infinitas construidas directamente sobre las aguas del lago Urriðavatn. Estas piscinas se calientan de manera natural con unos arroyos termales que hay cerca.
Las piscinas están a entre 38 y 40 °C. Las instalaciones incluyen saunas, baños fríos y una tetería que sirve infusiones de hierbas, haciendo que sea un sitio genial al que acudir tras un día viajando o haciendo senderismo. El balneario está abierto todo el año y los baños proporcionan un contraste agradable con el aire frío, sobre todo bajo el cielo estrellado a la caída de la noche. La entrada incluye acceso a los vestuarios y a toallas.

Seyðisfjörður
Situada al final de un fiordo, esta aldea está a 27 kilómetros de Egilsstaðir a través de un paso de montaña con espectaculares vistas panorámicas. Tiene casas de madera de colores y, aunque es un pueblo pequeño, cuenta con varias galerías de arte con artesanía local y obras contemporáneas. En la Iglesia Azul se celebran conciertos y eventos en verano y hay un sendero corto que lleva a Gufufoss, una cascada muy bonita.

Los Fiordos Orientales
En ocasiones, la gente llama Fiordos Orientales a toda la región de Austurland, ya que son su elemento geográfico más significativo. Los fiordos se extienden por la costa y en ellos hay aldeas de pescadores que son la muestra de la fuerte conexión que Islandia tiene con el mar. En verano, muchas especies de aves vienen a los acantilados de los fiordos a anidar. Los frailecillos son la principal atracción en este sentido. También se pueden ver focas nadando entre las rocas junto a la orilla.

Gufufoss
Esta cascada de 27 metros de alto está cerca de Seyðisfjörður. Hay un sendero corto desde la carretera que lleva a la cascada en pocos minutos. En los días con buen tiempo, el sol crea un efecto arcoíris en la bruma. Es una parada rápida en un viaje por carretera, estupenda para estirar las piernas o hacer fotos. En invierno, la cascada se congela parcialmente, formando estructuras de hielo que hacen que la catarata sea aún más bonita.

Klifbrekkufossar
Las cascadas son uno de los monumentos naturales de Islandia que los turistas más quieren ver. Y, por suerte, hay varias cerca de Egilsstaðir. Klifbrekkufossar es una serie de siete cataratas, una tras otra, con una caída total de 90 metros. Están en Mjóifjörður, junto a una carretera que serpentea por el fiordo. Hay un sendero que recorre las cascadas, con vistas al fiordo de abajo y que atraviesa praderas muy bonitas. Se tarda una hora en recorrer el camino entre ida y vuelta. Lleva agua, ya que es un sitio aislado sin nada cerca.

Hengifoss and Litlanesfoss
A pocos minutos en coche desde Egilsstaðir se llega al sendero que lleva a Hengifoss, la tercera cascada más alta de Islandia. Tiene una altura de 128 metros y está rodeada de columnas de basalto, creando una imagen imponente. Hay un sendero de 2,5 kilómetros desde el aparcamiento y se tarda unos 45 minutos de ida y otros tantos de vuelta, atravesando un valle precioso. El camino a Hengifoss pasa por Litlanesfoss, otra espectacular cascada rodeada de columnas hexagonales de basalto. El camino es de dificultad moderada, pero recompensa con vistas preciosas.

El clima en Egilsstaðir
En Islandia, el tiempo es impredecible y cambia constantemente. Incluso en verano, hay que estar preparado para un poco de todo. El este de Islandia no es tan frío como el norte o el centro del país, pero desde luego no hace calor. La cercanía de Egilsstaðir al mar suaviza un poco las temperaturas, pero hace que esté más expuesta a la lluvia y el viento.
El verano en Egilsstaðir, de junio a agosto, trae clima suave con temperaturas entre 10 y 15 °C. Los días son muy largos, con casi 24 horas de luz natural a finales de junio. Llueve ocasionalmente, con intervalos de sol y vientos suaves.
En otoño (septiembre y octubre), la temperatura baja hasta los 5 y 10 °C. Los campos y bosques, como Hallormsstaður, adquieren unos colores cambiantes preciosos. La lluvia aumenta y se pueden producir los primeros días de nieve a mediados de octubre. Es la estación con menos turistas.
Los inviernos (de noviembre a marzo) son largos y fríos en Islandia y el este del país no es una excepción. La temperatura suele estar por debajo de cero, con la nieve cubriéndolo todo. Los días son muy cortos, sin apenas luz natural a finales de diciembre y principios de enero. Conducir puede ser complicado y muchas carreteras, sobre todo las secundarias, cierran si el clima es muy malo. Por otro lado, si la noche es clara, hay buenas opciones de ver la aurora boreal.
En primavera, de abril a mayo, la temperatura sube a entre 0 y 10° C. La nieve empieza a derretirse, dando paso a campos verdes llenos de flores. Sin embargo, suele llover bastante, por lo que los senderos se embarran.

Qué llevar en la maleta para ir a Egilsstaðir
- Chaqueta y pantalones impermeables para los chubascos repentinos.
- Ropa a capas como un polar y una camiseta térmica para adaptarse a las temperaturas en constante cambio.
- Botas de senderismo con buen agarre.
- Gorro, guantes y bufanda, incluso en verano. Las noches pueden ser frías.
- Crema solar y gafas de sol para los días de verano. En invierno, el reflejo del sol en la nieve puede ser intenso.
- Botella de agua reutilizable: el agua del grifo es muy limpia.
- Si te gusta la vida salvaje, prismáticos para ver aves y renos.
- Cargador portátil para los aparatos en días de excursiones largas.
- Mochila pequeña para llevar cosas al hacer senderismo.

Consejos de viaje
- Alquila un coche todoterreno si vas a ir a zonas remotas. Muchas carreteras secundarias son de grava, con baches, así que elige un vehículo con buena altura.
- Mira el estado de las carreteras antes de conducir, sobre todo en invierno.
- Reserva el alojamiento con antelación, especialmente en verano, ya que algunos sitios se llenan.
- Lleva dinero en metálico para negocios pequeños, aunque aceptan tarjetas en casi todas partes.
- Respeta la naturaleza. No te salgas de los caminos marcados y llévate contigo toda la basura que generes. La naturaleza de Islandia es frágil y todos debemos colaborar para conservarla.
- Descárgate mapas sin conexión, ya que la cobertura puede ser débil en ciertas zonas.
- Prueba la comida local, sobre todo el pescado y el cordero.
- Mira el tiempo con asiduidad, ya que cambia muy rápidamente.
- Visita el centro de información del pueblo para conseguir mapas gratis y otra información valiosa.

Conclusión
Si estás planificando un viaje por Islandia, tal vez no hayas reparado en Egilsstaðir como una prioridad. Islandia Oriental es una de las regiones más aisladas y menos visitadas del país, pero está llena de cosas que merecen cada minuto de tu tiempo. Puede que Egilsstaðir no sea una gran ciudad, pero tiene mucho encanto. Es un sitio en el que el estilo de vida islandés se siente en su máxima expresión.



