
Islandia en invierno: guía para un viaje perfecto
Islandia en invierno se convierte en un lugar de cascadas congeladas, auroras boreales y aguas termales humeantes. Muchos viajeros huyen de los destinos fríos en invierno, pero te aseguro que Islandia en invierno vale muchísimo la pena.
Información clave
- El invierno en Islandia (noviembre-marzo) te da la oportunidad de ver auroras boreales, cuevas de hielo y hay mogollón menos turistas
- Las temperaturas van de -6°C a 3°C, bastante más cálidas de lo que te imaginas
- Las horas de sol cambian una barbaridad: desde apenas 4-5 horas en diciembre hasta más de 10 horas en marzo
- Para conducir en invierno necesitas planificarlo bien, pero las carreteras cerca de Reikiavik y la Costa Sur están abiertas
- En invierno hay ofertas brutales con precios más bajos para hoteles y vuelos
Resumen del invierno en Islandia
El invierno en Islandia va de noviembre a marzo. Trae días súper cortos, paisajes nevados y un rollo completamente diferente al del verano. Los sitios típicos se ven de otra manera en invierno y puedes hacer cosas que en verano ni te planteas.
Viene menos gente durante el invierno, así que te vas a encontrar con muchísima menos marabunta en los sitios famosos. Vale que se acortan un montón las horas de sol (sobre todo en diciembre), pero esa oscuridad viene genial para ver las auroras boreales y hacer fotos chulísimas.
Las temperaturas se quedan al punto de congelación en las zonas de costa como Reikiavik, normalmente entre -6 °C y 3 °C. Seguramente es más cálido de lo que pensabas, y eso se debe a la corriente del Golfo. Pero ojo, que el tiempo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos, y con los vientos que aparecen en cualquier momento muchas veces sientes más frío del que marca el termómetro.

¿Por qué ir a Islandia en invierno?
Islandia en invierno es un mundo aparte del verano:
- Auroras boreales: en invierno tienes esos cielos oscuros que necesitas para ver este espectáculo de luces alucinante
- Cuevas de hielo: estas cuevas de cristal azul solo aparecen en invierno y las fotos que salen son una pasada
- Menos turistas: tienes todo el espacio del mundo en sitios como el Círculo Dorado y la Laguna Azul
- Paisajes de invierno: se ven cascadas medio congeladas, playas negras con nieve y vapor saliendo de las aguas termales
- Chollos: los precios son mucho más baratos en hoteles, alquiler de coches y vuelos en temporada baja
- Ambiente invernal: puedes vivir las tradiciones navideñas islandesas, cafés súper acogedores y celebraciones locales

El clima
El tiempo en Islandia en invierno no es tan extremo como te puedes imaginar. Gracias a la corriente del Golfo, las zonas costeras se mantienen bastante templadas, mientras que tierra adentro ya la cosa se pone más fría.
El viento es lo que realmente puede fastidiarte en Islandia; hace que, incluso cuando no hace tanto frío, te quedes helado. Las tormentas de invierno pueden aparecer de la nada, con vientos fortísimos y nieve o lluvia intensas.
Lo principal del tiempo:
- Temperatura: normalmente entre -6 °C y 3 °C en las zonas bajas
- Lluvia/nieve: espera lluvia y nieve mezcladas, sobre todo en la costa sur
- Viento: puede ser brutal, hace que sientas mucho más frío
- Horas de sol: va desde unas 4-5 horas en diciembre hasta más de 10 horas en marzo
- Lo que toca: El tiempo cambia súper rápido. Como dicen los islandeses, "¡Si no te gusta el tiempo, espera cinco minutos!"
La costa sur normalmente recibe más lluvia y nieve, pero es más calentita, mientras que el norte de Islandia suele tener el cielo más despejado, pero hace más frío, por lo que el norte es genial para ver auroras boreales cuando se dan las condiciones.

Qué hacer
Aunque haga frío, Islandia tiene un montón de planes invernales que te enseñan lo brutal que es este país. Desde recorrer la ciudad hasta flipar con la naturaleza, aquí tienes cosas que no te puedes perder y que aprovechan al máximo el rollo invernal de Islandia.
Recorrer Reikiavik
La capital de Islandia está preciosa en invierno con todas las luces, cafés súper acogedores y eventos culturales. Ve a la iglesia Hallgrímskirkja para unas vistas de la ciudad que te van a dejar flipando, échale un ojo a museos como el Museo Nacional de Islandia y el Museo de Arte de Reikiavik, y prueba la comida de la ciudad. El Harpa Concert Hall tiene una fachada de cristal que queda espectacular cuando está iluminada contra esos cielos oscuros del invierno.
Darse un baño en aguas termales
Meterte en agua calentita mientras está nevando a tu alrededor es una de las mejores experiencias que puedes tener en Islandia en invierno. La Laguna Azul es la más famosa, pero también tienes que probar la Laguna Secreta (que es la piscina más antigua de Islandia), la Sky Lagoon que es más nueva y tiene vistas al mar, o las aguas termales naturales del Valle de Vapor de Reykjadalur, donde puedes hacer una caminata y luego meterte en un río calentito.
Descubrir cascadas
Las famosas cascadas de Islandia en invierno tienen un aspecto completamente diferente. Seljalandsfoss y Skógafoss en la costa sur se quedan medio congeladas, creando formas de hielo alucinantes. Gullfoss, que está en el Círculo Dorado, sigue impresionante incluso medio helada, rodeada de nieve y hielo por todas partes. Ojo con las plataformas para verlas, que se pueden poner súper resbaladizas.
Descubrir maravillas geológicas
La zona del Geysir está impresionante en invierno, con Strokkur echando chorros con todo el paisaje nevado de fondo. El Parque Nacional Thingvellir te enseña dónde se separan las placas tectónicas de América del Norte y Eurasia, y el invierno le da un rollo especial a todo este paisaje. La playa negra de Reynisfjara queda todavía más espectacular cuando está cubierta de nieve.
Explorar glaciares
Puedes hacer caminatas con guías por glaciares como Sólheimajökull o Skaftafell con expertos locales que te dan todo el equipo para andar por el hielo sin riesgo. Si quieres algo más fácil, los tours en moto de nieve por los glaciares Langjökull o Mýrdalsjökull son súper divertidos y las vistas son una pasada.
Cosas que solo puedes hacer en invierno
El invierno en Islandia te abre un montón de planes especiales que los que van en verano se pierden. Estas cosas de temporada son lo que hace que merezca la pena aguantar el frío, te dan recuerdos y fotos que los que viajan en verano no pueden conseguir.
Cazar auroras boreales
Los cielos oscuros del invierno son perfectos para ver la aurora boreal. Puedes apuntarte a un tour con guía desde Reikiavik o irte por tu cuenta a sitios oscuros lejos de las luces de la ciudad. Para que te salga bien, mira las predicciones de auroras, busca que esté el cielo despejado y ve entre septiembre y abril. Sitios buenos para verlas son el Parque Nacional Thingvellir, la Laguna Glaciar Jökulsárlón y zonas cerca del lago Myvatn en el norte.
Meterte en cuevas de hielo cristalino
Estas cuevas de hielo azul solo se forman en invierno, cuando el agua de los glaciares se congela. Las cuevas de hielo más famosas están en Vatnajökull, que es el glaciar más grande de Europa. Siempre ve con guías que sepan lo que hacen, porque estas cuevas van cambiando durante toda la temporada.
Ir a festivales de invierno
Puedes vivir tradiciones islandesas únicas en los festivales de invierno. El Festival de Luces de Invierno en Reikiavik (febrero) llena la ciudad de instalaciones de luz y eventos que están genial. La tradición navideña de los 13 Yule Lads está muy guay para conocer el folclore islandés de primera mano. Si te cuadra en fechas, vive el Þorrablót en enero/febrero, que es una fiesta de pleno invierno con comidas tradicionales islandesas.
Probar deportes de invierno
Aunque no es conocida como sitio de esquí, Islandia tiene zonas pequeñas de esquí cerca de Akureyri en el norte y en Bláfjöll cerca de Reikiavik. Para deportes de invierno más únicos, puedes probar escalada en hielo en cascadas congeladas o caminar con raquetas por paisajes invernales.
Cómo es cada mes de invierno en Islandia
Cada mes de invierno en Islandia tiene su rollo. Desde la primera nieve de noviembre hasta cuando empieza a oler a primavera en marzo, elegir cuándo ir depende de lo que quieras ver y hacer.
Noviembre
Noviembre es cuando empieza el cambio a invierno, con temperaturas que suelen ir de -1°C a 4°C. Tienes unas 5-8 horas de sol al día, que se van acortando según avanza el mes. En noviembre ya están cerradas las F-Roads, así que llegar a las Tierras Altas está súper complicado. Por el lado bueno, a finales de noviembre tienes muchas posibilidades de ver auroras boreales. Suele caer la primera nevada gorda, pero en las zonas de costa igual llueve en vez de nevar.
Diciembre
Diciembre trae el solsticio de invierno y apenas 4-5 horas de sol al día. Las temperaturas suelen estar entre -4°C y 2°C. Las noches de diciembre son perfectas para las auroras boreales mientras los pueblos están todos decorados para las fiestas. Los islandeses se abrazan a la oscuridad con luces, velas y quedadas. Las tradiciones navideñas islandesas son únicas, con los 13 Yule Lads y las hogueras y fuegos artificiales de Nochevieja, hacen que diciembre sea una pasada para visitarlo.
Enero
Enero suele ser el mes más frío, con temperaturas entre -6 °C y 1 °C. Las horas de sol empiezan a aumentar (unos 4 minutos cada día), yendo de 4-5 horas a principios de mes a 6-7 horas al final. Enero está genial para visitar cuevas de hielo y ver auroras boreales. Después del ajetreo navideño, te encuentras con menos turistas y mejores ofertas en hoteles.
Febrero
Febrero sigue siendo frío pero ya tienes más luz, unas 7-10 horas al final del mes. Las temperaturas suelen estar entre -5 °C y 2 °C. Febrero está bien para actividades de invierno con más horas de sol que diciembre o enero. El Festival de Luces de Invierno en Reikiavik trae instalaciones de luz y eventos que alegran la ciudad un montón. Febrero es un mes genial para ir si quieres ambiente invernal, mezclando buenas condiciones para ver auroras con suficientes horas de sol para hacer cosas durante el día.
Marzo
Marzo ya trae un rollo más primaveral, con las horas de sol subiendo a 10-13 horas y temperaturas entre -2 °C y 3 °C. Todavía puedes hacer cosas de invierno como cuevas de hielo (aunque empiezan a cerrar a finales de marzo) mientras disfrutas de más horas de sol para explorar. Aún tienes posibilidades de ver auroras boreales, sobre todo a principios de marzo. El tiempo se vuelve más loco, con posibilidad tanto de tormentas de invierno como días que ya huelen a primavera.
Conducir en Islandia en invierno
Aunque conducir te da la máxima libertad para tu viaje por Islandia, ir en invierno necesita que planifiques y vayas con más cuidado. Entender cómo están las carreteras, qué necesitas en el coche, medidas de seguridad y otras opciones te va a ayudar a decidir si conducir por tu cuenta es buena idea para tu viaje invernal.
Cómo están las carreteras
Las carreteras en invierno en Islandia cambian un montón según dónde estés y qué tiempo haga. La Ring Road (Ruta 1) y las carreteras cerca de Reikiavik las limpian y mantienen regularmente, pero aún así pueden cerrarse cuando hay tormentas. Las zonas que están en el quinto pino y las carreteras de montaña (F-roads) están completamente cerradas en invierno, y conducir por ahí es ilegal y súper peligroso.
El hielo negro es un peligro bestial, sobre todo cuando se congela y descongela todo el rato. La nieve puede hacer que no veas nada, y los vientos fuertes a veces crean de repente condiciones donde no ves ni tu propia mano. Consulta las condiciones de las carreteras todos los días en la web de la Administración de Carreteras de Islandia (road.is) o en su app, que te da información en tiempo real sobre cierres y cómo están las cosas.
Preparar tu coche
Alquila un 4x4 con neumáticos de invierno. Esto no es negociable para ir seguro. Asegúrate de que tu coche de alquiler tenga rueda de repuesto, rascador de hielo y kit de emergencia.
Cuando recojas el coche:
- Mira bien los neumáticos y su estado
- Prueba todas las luces y limpiaparabrisas
- Aprende a usar la calefacción y los desempañadores
- Pregunta cuánto espacio libre tiene el coche por debajo
- Entiende bien qué cubre el seguro (sobre todo para daños típicos del invierno)
Mantén el depósito al menos medio lleno siempre, porque las gasolineras en sitios perdidos (si es que encuentras alguna) pueden tener horarios raros o cerrar de repente en invierno.
Ir seguro
Conducir en invierno en Islandia es otro rollo:
- Ve despacio, sobre todo en curvas y cuestas donde el hielo se esconde
- Deja mucho espacio entre coches (al menos 4 segundos)
- Frena suave y con tiempo para no derrapar
- Usa marchas cortas cuando bajes cuestas
- Lleva los faros encendidos siempre, incluso de día
No pares en medio de la carretera para hacer fotos; usa los apartaderos que hay puestos para eso. Mira el pronóstico del tiempo antes de salir, y estate preparado para cambiar planes si las cosas se ponen feas. Dile siempre a alguien tu ruta y cuándo esperas llegar.
Descárgate la app 112 Iceland, que te deja registrarte con los servicios de emergencia y mandar tu ubicación si hace falta. Lleva cosas de emergencia como mantas, comida, agua y un cargador de móvil portátil.
Otras maneras de moverte
Si eso de conducir en invierno te parece muy complicado, tienes otras opciones:
- Tours con guía: tours de un día desde Reikiavik que cubren las atracciones principales como el Círculo Dorado, Costa Sur y ver auroras boreales
- Autobuses públicos: conectan las ciudades principales, aunque en invierno puede haber menos servicio
- Vuelos nacionales: conexiones rápidas entre Reikiavik y ciudades como Akureyri en el norte
- Traslados del aeropuerto: autobuses directos entre el aeropuerto de Keflavik y Reikiavik
Quedarte en Reikiavik y hacer tours de día con guía es una opción genial para los que no se ven conduciendo en invierno. Tienes a alguien que sabe lo que hace y te olvidas de preocuparte por la seguridad.
Ruta de 7 días por Islandia en invierno
Esta ruta de una semana mezcla las atracciones que no te puedes perder con experiencias típicas del invierno, aprovechando al máximo las horas de sol y teniendo en cuenta cómo puede estar el tiempo. Cubre lo mejor de Islandia mientras te da tiempo suficiente en cada sitio.
Día 1: Llegada y Reikiavik
Aterrizas en el aeropuerto de Keflavík y te vas a Reikiavík (45 minutos). Te pasas el día explorando el centro de la ciudad, que se recorre súper bien a pie. Ve a la iglesia Hallgrímskirkja, date una vuelta por el puerto y échale un ojo al Museo Nacional de Islandia. Cena en alguno de los buenos restaurantes de Reikiavik y, si las condiciones están bien, apúntate a un tour de auroras boreales.

Día 2: Círculo Dorado
Esta ruta clásica cubre tres sitios principales: Parque Nacional Thingvellir (caminas literalmente entre placas continentales), zona geotérmica del Geysir (ves como Strokkur echa chorros cada 5-10 minutos), y la cascada Gullfoss. Como en invierno los días son súper cortos, sal pronto y llévate una linterna frontal por si se hace de noche mientras estás por ahí. Puedes parar en la Laguna Secreta o en el Fontana Spa para entrar en calor.

Día 3: Lo mejor de la Costa Sur
Conduce hacia el este por la Ring Road para ver las cascadas Seljalandsfoss y Skógafoss, que en invierno están medio congeladas. Ve a la playa de arena negra de Reynisfjara (mantente bien lejos de las olas) y al encantador pueblo de Vík. Puedes volver a Reikiavik o seguir hacia el este para quedarte cerca de Kirkjubæjarklaustur, así te preparas para lo que toca mañana.

Día 4: Laguna Glaciar y cuevas de hielo
Sigue hacia el este hasta la Laguna Glaciar Jökulsárlón, donde tienes icebergs azules flotando en la laguna y que llegan hasta la Diamond Beach. Apúntate a un tour por cuevas de hielo en el Parque Nacional Vatnajökull (reserva con muchísima antelación). Quédate a dormir por la zona, porque este día vas a conducir un montón.

Día 5: Del este al norte
Conduce hacia el norte por los fiordos orientales, disfrutando de los paisajes costeros, hasta llegar a la zona del lago Mývatn. Esta zona tiene características geotérmicas, paisajes volcánicos y es perfecta para ver auroras boreales. Date un baño en los Baños Naturales de Myvatn y quédate a dormir por allí.

Día 6: Akureyri y alrededores
Explora la "capital del norte" de Islandia, Akureyri, que es una ciudad súper bonita con restaurantes geniales y sitios culturales que están muy bien. Ve a la cascada Goðafoss, que está cerquita, y plantéate ir a ver ballenas desde Húsavík (aunque en invierno se ven menos). Vuelve a Akureyri para dormir.

Día 7: Vuelta a Reikiavik
Puedes coger un vuelo nacional de vuelta a Reikiavik (45 minutos) o hacer la ruta en coche, que es súper bonita (unas 4,5 horas si el tiempo acompaña). Si conduces, planifícalo para las horas de sol y déjate tiempo extra por las condiciones del invierno. Pásate la última noche disfrutando de los restaurantes de Reikiavik y si te apetece, de la marcha.

Consejos
Aunque planificar bien es importante para cualquier viaje, Islandia en invierno requiere que tengas en cuenta aspectos especiales para que todo vaya bien y te lo pases genial. Estos consejos prácticos te van a ayudar a sacarle el máximo partido a tu aventura invernal y evitar los típicos problemas que le pasan a quienes no planifican.
- Controla el presupuesto: Aunque en invierno los hoteles y el alquiler de coches están más baratos, los tours y la comida siguen siendo caros. Busca alojamientos con cocina para poder hacerte algo de comida tú mismo.
- Reserva pronto los tours de cuevas de hielo: se llenan súper rápido, a veces con meses de antelación.
- Vístete por capas para temperaturas que cambian: las capas son fundamentales porque vas a estar yendo constantemente de sitios calentitos a la calle, que hace frío.
- El frío se carga las baterías rapidísimo: mantén el móvil y la cámara dentro del abrigo cuando no los uses.
- Hazte caso de las advertencias del tiempo: los islandeses se toman el tiempo muy en serio. Si la gente de allí te dice que no viajes, hazles caso.
- Añade días extra a tu viaje por si hay retrasos por el tiempo o se cancelan tours.
- Mantente conectado: cómprate una tarjeta SIM local o asegúrate de que tu plan de móvil funciona en Islandia para navegar y comunicarte en emergencias.
- Llévate el bañador: las piscinas geotérmicas en invierno están todavía mejor, así que no te olvides del bañador.
- Para fotografiar auroras boreales: llévate un trípode y aprende a usar los ajustes manuales de tu cámara antes del viaje.
- Aprovecha las pocas horas de sol: planifica cosas de interior para primera hora de la mañana y por la noche, deja las horas de sol para explorar al aire libre.
Conclusión
El invierno en Islandia es algo especial. Las cascadas congeladas, las playas negras con nieve y las auroras boreales verdes contra cielos súper oscuros hacen que sea un viaje increíble.
Vale que el invierno tiene sus pegas: días cortos, tiempo que cambia de la noche a la mañana y, a veces, conducir es un rollo, pero las experiencias compensan de sobra. Estar de pie en un glaciar o meterte en una fuente termal mientras nieva son cosas que vas a recordar toda la vida.











